Según la revista médica Elseiver, más de nueve millones de personas sufren de piernas cansadas. Los síntomas y causas son diversas pero cambiando algunos hábitos podemos aliviar sus efectos. A continuación te lo explicamos.
Síndrome de las piernas cansadas
Los síntomas más frecuentes en las piernas son:
Pesadez y cansancio, según la persona se puede percibir de forma diferente. Puede ser una sensación de entumecimiento o adormecimiento de las piernas, dolor como de agujetas, calambres musculares incluso picor.
Varices, es una causa evidente de problemas de circulación en las piernas.
Edemas en las piernas, en ocasiones pueden aparecer pequeños hinchazones producidos por la acumulación de sangre.
Piernas hinchadas, de rodilla hacia abajo aumentando su volumen. Se puede llegar a observar la piel brillante. Incluso si se presiona con suavidad y cuidado la piel la marca del dedo durante unos minutos.
¿Qué podemos hacer para favorecer la circulación?
Seguramente tenemos hábitos que podemos cambiar para favorecer la circulación de la sangre en las piernas. Te damos 8 claves o consejos que te ayudarán a reducir el síndrome de piernas cansadas:
Una alimentación saludable y equilibrada. Evitar el consumo de refrescos azucarados, alcohol, alimentos con mucho azúcar, alimentos procesados o industriales, fritos, embutidos y grasas. Controlar el sobrepeso es esencial.
Hidratación. Importante beber mucha agua para evitar la retención de líquidos. El uso de cremas hidratantes.
Práctica de ejercicio. No es necesario machacarnos en el gym o prepararnos para correr un maratón. Podemos caminar con frecuencia o correr, la práctica de la natación o la bici nos puede ayudar porque estimulamos la circulación y los músculos de las piernas. Con 20 o 30 minutos diarios es suficiente.
Elevar las piernas. Poner las piernas en alto si es posible durante 10 a 15 minutos la día. La mejor manea es estirase en la cama o sofá con las piernas estiradas. Colocar un cojín o almohada debajo de las pantorrillas. La piernas deben estar levantadas unos 10 a 20 cm por encima del resto del cuerpo.
Evita el exceso de calor. El calor excesivo perjudica la circulación de las piernas. Como la exposición prolongada al sol o realizar actividades en momentos del día con mucho calor, radiadores o estufas muy cerca de las piernas.
Evitar calzado o ropa muy apretada. La ropa o calzado muy ceñida nos puede perjudicar en la circulación de nuestras piernas.
Drenajes y masajes en las piernas. Ayudan a mejorar la circulación.
Refrescar las piernas con frío. El frío favorece la circulación sanguínea en las venas y ayudan a relajar los músculos. Los baños de agua fría o el uso de medias frías son muy efectivas para ayudar a relajar las piernas con síntomas de piernas cansadas.
Las medias frías alivian la pesadez y cansancio de piernas, para más información: